Por: Miguel Ernesto Yusty
TOP GUN MAVERIK, es una película dirigida por Joseph Kosinski y estrenada a mediados de 2022. Es la segunda parte de TOP GUN, de 1986, que dirigida por Tony Scott, se convirtió en un éxito de público y en un referente del cine bélico, así como en un ejemplo del estilo característico de su director. Pasadas más de dos décadas, el segundo filme se posiciona otra vez entre los preferidos de los espectadores y de la crítica, llegando a recibir una cantidad inusitada de nominaciones a premios en eventos de toda índole. ¿Cuál es la importancia de esta película?
TOP GUN, la primera, fue la oportunidad para que Tom Cruise se consagrase como un ídolo de masas. La película exaltaba el heroísmo militar con más finura que la alcanzada por las películas de Rambo, también de ese período. Tony Scott, quien falleció por mano propia en 2012, se había formado para ser pintor y creía en la grandilocuencia que el cine debía tener para atraer al espectador. En su película eran frecuentes los colores naranjas en los cielos, que no importaba si eran naturales o consecuencia de poner filtros frente a los lentes de la cámara, porque se trataba de establecer las normas estéticas para un relato cinematográfico. Así, cada elemento encajaba en su universo, con la certidumbre que en el mundo real tales cosas serían absurdas o imposibles. Tal fue la coherencia de la propuesta, que en los años 80, el público asistió masivamente a ver la película. Sin embargo, TOP GUN no es un filme para cambiar la historia del cine, aunque la segunda entrega tal vez tenga algo más de relevancia.
TOP GUN MAVERIK si prueba que el contexto en el que se estrena una película influye en la receptividad que el público tenga de ella. El filme debía estrenarse en 2019, pero se aplazó para el 2020, el año en que las cuarentenas motivadas por el COVID 19, espantaron a los espectadores de las salas de cine. Cuando un estreno se retrasa en demasía, el dinero invertido en su producción no se recupera y la película corre el riesgo de perder vigencia. Pero la convicción de personalidades como las de Tom Cruise respecto a la importancia de ver el cine en pantalla grande hizo que la película esperase, sin estrenarse, hasta que el momento que le fue adecuado. Por eso el éxito de TOP GUN MAVERIK es el triunfo del cine visto como cine y no como televisión. Más allá de las cualidades cinematográficas del filme, su importancia radica en que el equipo creativo priorizó la calidad de la exhibición por encima de la pronta recuperación del dinero invertido. De esta forma, el mundo ha terminado de convencerse de que el cine se hace para el cine y que la pantalla chica es una cuestión secundaria.
Por Miguel Ernesto Yusty
