BEEKEEPER es cine de justicieros. Este es un género en el que el protagonista, decepcionado por el sistema legal, hace justicia por su propia mano. Las películas pueden ser buenas o malas, pero sin duda responden a necesidades de la sociedad y del público insatisfecho con la administración de justicia de sus países. BEEKEEPER tiene a Jason Statham desempeñando el rol protagónico y a David Ayer como director. Es un proyecto de bajo presupuesto, que sea convertido en una sorpresa para una taquilla incierta, que aunque va en aumento desde los tiempos del COVID, sigue siendo objeto de preocupación para quienes analizan el cine como industria.

Con pinta de convertirse en una saga, BEEKEEPER plantea un mundo en el que una organización ultrasecreta cuida a los indefensos ciudadanos como si fueran integrantes de una colmena que debe mantenerse en equilibrio, como en la balanza simbólica de la justicia. De ahí en adelante, no habrá precio pequeño ni grande que compre el perdón para quienes si salen del camino recto y el personaje de Jason se hará cargo del castigo.

Charles Bronson o Clint Eastwood son dos actores que se hicieron famosos por interpretar a justicieros en la pantalla grande. Pero también Robert De Niro con el Travis de TAXI DIVER, hizo su aporte al género en 1976. Por su parte, Silvester Stalone, con la primera película sobre Rambo, en 1982, pasa de ser veterano y víctima de la guerra, a castigar de forma inclemente de la sociedad que no le permite encontrar un lugar para ubicar su figura de guerrero derrotado. En la actualidad, actores de gran prestigio, como Denzel Washington, construyen icónicos personajes que agitan las salas de cine. BEEKEEPER cumple ahora con su función catártica y sanadora para quienes han sido defraudados por el sistema. ¿Cuántas películas seguirán a esta de 2024?