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El show debe seguir

Por María Eugenia Rojas
Directora del Area de Literatura, Medios audiovisuales y escrituras de la Universidad del Valle. Guionista, investigadora de la obra de Álvaro Mutis y del Cuento Colombiano Contemporáneo.

Mi película amada en cualquier época del año es ”All that Jazz” de 1979, conocida en algunos países como “El show debe seguir”, es uno de los pocos musicales gringos que me cautivan, por la apología a la creación estética y porque escenifica la conciencia del patetismo y lo efímero de la existencia humana, en la plasticidad de sus imágenes y coreografías, la maravilla de la banda sonora, la historia llevada magistralmente y la actuación impecable que tiene como protagonista a Roy Scheider en su papel de Gideón el exigente maestro y coreógrafo que conciente de su aproximación al final, monta un último y delirante acto como metáfora del esplendor y decadencia de los actores del mundo del espectáculo.

Escrito y dirigido por Bob Fosse, este musical de carácter autobiográfico, se basa en su vida y carrera profesional como bailarín, coreógrafo y director de cine y se convierte en un réquiem premonitorio de su propia desaparición, ocurrida a causa de un infarto, ocho años después. Por asociación libre, llegan a mi mente estas palabras que escuche o leí en alguna parte: “Murió de muerte, lo mató la vida”.

Recomiendo:”Todo ese Jazz “ escuchando la apoteósica pieza “Bye Bye Love” y el tema “On Brodway” del gran guitarrista George Benson , en una tarde de lluvia y de ocio navideño para instalarnos en ese sentimiento irrepetible y sublime que permite el disfrute de una pieza maestra.

Entre sus galardones se cuentan; Oscar a la mejor dirección artística, al mejor diseño de vestuario, al mejor montaje y a la mejor banda sonora, ó la Palma de oro del festival de Cannes en el mismo año.

 



Como segunda opción recomiendo “Gremlins” , film de ciencia ficción,de comedia negra y horror dirigido por Joe Dante y producido por Steven Spielberg y estrenado en 1984 y su protagonista la mascota Gizmo, ese pequeño monstruo destructivo hecho para entretener a niños y adultos en las noches sin sueño.